Manejamos por Las Vegas Boulevard, pero aún estoy muy nervioso por el viaje en avión como para realmente apreciarlo. Descanso mi cabeza contra el apoyacabezas mientras Paula y Vanesa sacan la cabeza por el techo corredizo de la limo como pequeños cachorros. Casi sonrío.
Estaba igual la primera vez que viajé en limo. Hace calor en Nevada y el techo corredizo no permite al aire acondicionado trabajar a su potencia completa.
—¡Cerrando el techo! —llama Damian a través de la ventana de enfrente,como si leyera mi mente.
Damian decidió que manejaría la limo, no confiando en nadie más para transportar a su preciosa carga por los alrededores. Aquí hay un hecho desconocido de Damian, él tiene una licencia para manejar un autobús, un auto,una limosina y un camión. Cuántos de ellos caen en la misma categoría de licencia, no tengo idea, pero sigue siendo impresionante.
Vanesa y Paula se dejan caer, acomodándose cómodamente en sus asientos con restos de risas sacudiendo sus cuerpos. Sus caras están enrojecidas con el calor de afuera y tan pronto como el techo se cierra, siento el aire frío acariciar mi piel.
Miro a Paula deslizarse a través de los asientos de cuero directo hacia mí.
Mis ojos revolotean por su linda blusa azul cielo. Se aferra a su delgada cintura y caderas, exponiendo una pequeña porción de su escote. La tela es delgada y sé que puedo arruinarla fácilmente con mis dientes. Ella se quitó su chaqueta hace bastante tiempo y tuve el placer de cargarla alrededor conmigo.
Durante el día, Vegas es aun sorprendentemente concurrida, llena con los turistas que quieren evitar la vida nocturna de Vegas. No los culpo. La vida nocturna de Vegas puede ser bastante salvaje. Todos están buscando hacer su propia historia de Hangover y para disfrutar los placeres más oscuros de la ciudad.
Lentamente hacemos nuestro camino por Las Vegas Boulevard y muy pronto llegamos al MGM Grand. Los otros no desperdician el tiempo en trepar con entusiasmo desde el auto, pero espero un poco para reunir mis pensamientos.
Paula también espera, mirándome curiosamente.
—Llegaste a Las Vegas —me dice y la miro.
Se mete un mechón de su largo cabello chocolate detrás de su oreja y sus labios se curvan en un amago de sonrisa.
—Estoy orgullosa de ti.
Sus largos y suaves dedos se deslizan sobre la parte de atrás de mi mano que yace distraídamente en mi regazo. No seporque me siento tan fuera de ello. Mi pecho duele y el aire cálido me hace más difícil respirar. Este es el comienzo de mi nueva vida, la vida que realmente nunca esperé tener. Lahice a través de trabajo duro y dedicación…. así que ¿porque de repente me siento como si no fuera lo suficientemente fuerte para estar aquí? El sentimiento de mi inminente fracaso está pesando sobre mí y no puedo sacármelo y no he sido capaz de hacerlo desde que me dormí anoche. Supongo que siempre esperé que esto se cayera a pedazos.
Cada cosa buena que consigo nunca funciona y estoy cauteloso de porque esto me sigue pasando.
—Eres peso muerto —la voz de papá suena en mi mente.
Recuerdo reírme de él.
—No soy peso muerto. Soy un jodido globo, un puto avión volando y nunca voy a caer.
—Los globos quizás vuelen alto, pero después de un cierto límite explotan y los aviones a veces tienen que aterrizar. Los dos tienen sus necesidades y limitaciones, igual que tú. Podrías haber dicho un pájaro, ellos no necesitan mucho sustento y no vuelan tan alto, pero tenías que ir y ponerte cientos y cientos de metros sobre todos los demás. Eso dice mucho de ti, de tu personalidad y de tu temperamento. Siempre tienes que ser el número uno. Siempre pones lo que quieres y necesitas antes que todo lo demás, y siempre tienes que tener el control… Siento lastima por ti, Pedro.
Trago. ¿Lo habría matado decir que está orgulloso de mí en forma normal?
Mierda, él ni siquiera necesitaba decirme que estaba orgulloso de mi, en realidad disciplinarme y darme un consejo sobre lo que hacer y sobre lo que no, habría sido suficiente. Si, lo jodí mucho con la escuela y las chicas. Si, dejé la escuela y me negué a tener un trabajo normal.
Probablemente bebí mucho y empecé muchas peleas, pero solo era un niño. ¿No es lo que los niños hacen?
Probablemente bebí mucho y empecé muchas peleas, pero solo era un niño. ¿No es lo que los niños hacen?
Este año no ha hecho nada más que inflarme… ¿Por qué aún no he explotado? ¿Por qué no he aterrizado por combustible? Me estoy acercando peligrosamente al sol con ningún signo de explosión. Mi combustible está en líneas rojas, pero mis motores están funcionando muy bien con los gases.
—Y estoy seguro de que tú papa está orgulloso de ti también —agrega Paula con una sonrisa.
Y luego me golpea. Aún no he explotado o estrellado y quemado por ella.
Me ha estado manteniendo alto. Si no fuera por ella, hubiera caído en mi primera pelea en el torneo amateur contra Frederick Kennedy, estaba a punto de arrojar la toalla, pero me ayudó. Vino a mi habitación y me tocó. No tenía que hacerlo. No hice nada más que tratarla como la mierda, solo buscaba conseguir algo de ella.
Me dejó entrar… vio algo en mí y me dejó entrar en su vida.
La otra noche Luciano me preguntó porque la elijo a ella, pero la pregunta real es, ¿Por qué ella me elige a mí? ¿Por qué se arriesga conmigo? No es la afortunada aquí, yo lo soy,y cuento mis bendiciones cada jodido día. Paula es la soga atada a mi globo. No he explotado porque ella no me ha dejado .Paula es mi abastecimiento de combustible, siguiéndome mientras me remonto sobre las nubes. Llena mi combustible una pequeña porción a la vez, así no me llevo por delante a mí mismo. Me mantiene conectado a tierra y es por eso que la amo.
La otra noche Luciano me preguntó porque la elijo a ella, pero la pregunta real es, ¿Por qué ella me elige a mí? ¿Por qué se arriesga conmigo? No es la afortunada aquí, yo lo soy,y cuento mis bendiciones cada jodido día. Paula es la soga atada a mi globo. No he explotado porque ella no me ha dejado .Paula es mi abastecimiento de combustible, siguiéndome mientras me remonto sobre las nubes. Llena mi combustible una pequeña porción a la vez, así no me llevo por delante a mí mismo. Me mantiene conectado a tierra y es por eso que la amo.
Paula no sabe de la tensa relación con mi papá, al menos no enteramente, y realmente no es un asunto suficientemente grande para compartirlo con ella.
—Ya no me importa eso —replico, deslizando mis brazos alrededor de su cintura y llevándola más cerca de mí.
—¿No?
Niego.
—Solo lo que tú piensas de mí importa.
—¿Eso es verdad?
Asiento, deslizando mi mano debajo de su camiseta y acariciando su espalda baja. Solo el toque es suficiente para aliviar los nervios en mi estómago.
—¿Y qué piensas de mí?
Ella frunce los labios en un pensamiento y está a punto de hablar, cuando el cabello claro de Luciano y sus ojos verdes se asoman a la puerta y se pega al auto
—¿Ustedes dos vienen?
—Cinco minutos —demando—. Cierra la puerta.
Con un gesto rápido, cierra la puerta.
—¿Podemos hacer esto más tarde? Estamos reteniendo a todos.
Niego ligeramente.
—Ahora está bien.
—Está bien —deja caer su mirada y mueve nerviosa mi camiseta—. Pienso que eres insaciable, intenso, agresivo, difícil de leer, y terco.
Noticias Viejas. Incluso yo sé eso.
—Pero también pienso que eres confiable, determinado, trabajador,apuesto…
—Bueno en la cama —la interrumpo. Sintiéndome de repente juguetón—.Asombroso con mis manos, pero mejor con mi boca y tengo una buena medida de pe…
—Ego —interviene, sus mejillas enrojecidas—. Si, tu ego es enorme.
—¿Es así como lo estamos llamando ahora? Es un extraño sobrenombre pero creo que puedo hacerlo funcionar.
Golpea mi pecho y agarro sus brazos, fijándolos en sus costados. Se revuelve contra mí tratando de soltarse. Apenas estoy usando fuerza para sostenerla y encuentro extremadamente divertido (y un poco excitante) que pelee tan duro contra mí.
—Tu amas mi ego —me rio, tiro de ella así que su pecho se roza con el mío y sus labios están a pulgadas de los míos—. Tú amas la forma en la que se siente mi ego.Inclino la cabeza hacia adelante y jadea mientras succiono su labio inferior en mi boca. Lo dejo ir.—Si te gusta la forma en que sabe esta por ser visto.
Miro su cara mientras sus labios se aprietan en una línea seria.
—Mantén este agarre en mí y te garantizo que tu ego no verá la parte de afuera de tus pantalones en todo el viaje.
Arqueo una ceja, pero su cara no titubea y la suelto. Ni un segundo después,estrella sus labios contra los míos. Paula separa sus muslos y los desliza sobre los míos mientras rastrilla los dedos a través de mi cabello. Me toma enteramente por sorpresa. Estoy completamente aturdido, mi cerebro y mi cuerpo fuera de sincronización, mientras se dispersan desesperados por ponerse al día con el otro.
Mientras su lengua masajea brutalmente la mía, mis manos suben y agarran su culo, empujándola duro contra mí. Con una respiración brusca, empuja sus caderas contra mí y gimo en su boca. Por suerte, las ventanas son de vidrio negro y nadie puede ver hacia adentro. Solo mis ojos verán a mi chica cuando se pone así, caliente y dominante. Creo que tener sus manos en mí es exactamente lo que necesito para mitigar los pensamientos negativos. Mi cabeza nada con su sabor y la sensación de ella contra mí. Solo ella tiene el poder de consumirme, de erradicar todo el tren del pensamiento racional. Incluso un roce ocasional de su mano contra mi piel es suficiente para enviar un shock de calor a través de mi sistema
Paula se aleja una pulgada y nuestro aliento choca. Miro su cara. Sus ojos están achicados en rendijas lujuriosas, sus labios hinchados de nuestro beso. Las olas de energía entre nosotros tiene a mi corazón golpeando y toma toda mi fuerza de voluntad no tragar duro.
—Prometo que amaré cada segundo que tenga para probarte.
Se inclina hacia adelante y en un movimiento dolorosamente lindo, me besa suavemente antes de deslizarse fuera de mí y salir del auto.
wow buenísimos,seguí subiendo!!!
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